Termina la espera, hoy se corre telón del Mundial

Las vuvuzelas están afinadas o desafinadas, dirían algunos, los técnicos dan los toques finales a los entrenamientos y la FIFA aguanta la respiración para que todo salga a la perfección.

La espera de cuatro años terminó y la Copa del Mundo se pone en marcha el viernes con los partidos inaugurales entre México-Sudáfrica y Uruguay-Francia.

Cuatro horas y media después, Uruguay enfrentará al subcampeón Francia en Ciudad del Cabo.

Mientras crece el entusiasmo entre la población local y los visitantes con las ruidosas trompetas conocidas como vuvuzelas llevando la voz cantante las selecciones se preparan para el arranque de un acontecimiento social, político y deportivo.

Se trata de la gran apuesta del presidente de la FIFA Joseph Blatter de organizar la competencia deportiva más importante del planeta en el continente más pobre del mundo.

“Sabíamos que Sudáfrica nunca sería la misma”, comentó recientemente el presidente sudafricano Jacob Zuma. “Millones de nuestra gente ha esperado años por este torneo con esperanza, orgullo y una sensación de que les pertenece”.

Las preocupaciones son de todo tipo, desde la seguridad en un país con una de las tasas de crimen más altas del mundo, hasta la construcción de los estadios. Todo parece estar superado e impera una sensación de ánimo.

Resta por ver si ese entusiasmo puede transmitirse a los “Bafana Bafana”, posiblemente la más débil selección anfitriona en la historia de los mundiales, enterrada en el puesto 83 del ranking de la FIFA.

Aunque enderezó su rumbo bajo la conducción del técnico brasileño Carlos Alberto Parreira, Sudáfrica carece de figuras de renombre y no contará con su máximo artillero Benni McCarthy, excluido del plantel final.

Su debut tampoco será un paseo, contra un equipo mexicano repleto de jóvenes talentosos que aspira a superar los octavos de final por primera vez desde que fue sede del torneo en 1986.

México llega con el ánimo por las nubes luego de vencer 2-1 al campeón mundial Italia en su último fogueo. No tiene problemas serios de lesiones, aunque existe cierto malestar entre jugadores como Guillermo Ochoa y Andrés Guardado que podrían haber perdido la titularidad en el esquema del técnico Javier Aguirre.